
En un acto celebrado este viernes en la Plaza de España de Montijo, Santiago Abascal lanzó una dura ofensiva política contra el Gobierno central, al que definió como “una mafia corrupta, debilitada y sometida”. Según el presidente de VOX, esta situación permite que “separatistas y oportunistas de todo tipo se aprovechen de la debilidad de España y de este Gobierno”, en referencia a los pactos y negociaciones que, a su juicio, han erosionado la estabilidad del país.
Abascal dedicó parte de su intervención a criticar la “reunión bilateral entre el Gobierno de España y el Gobierno de Marruecos de la que no se sabe nada”. El líder de VOX aseguró que se trata de una cita “absolutamente opaca” y “alejada del sentido común”, exigiendo transparencia y explicaciones ante lo que considera un encuentro decisivo para los intereses nacionales.
El dirigente de VOX también reprochó el “abandono” que, en su opinión, el bipartidismo ha provocado en Extremadura durante años. Señaló la falta de presupuestos autonómicos, que atribuyó a “la cabezonería de la señora Guardiola”, así como el deterioro del campo extremeño, “padeciendo el exceso de burocracia y las políticas verdes que tanto el Partido Popular como el Partido Socialista aprueban en Bruselas”. También mencionó el colapso de la sanidad pública, los problemas de seguridad ciudadana y la falta de protección efectiva para las mujeres como ejemplo del desgaste de los servicios básicos.
En referencia a las acusaciones de machismo lanzadas por la presidenta regional del PP, María Guardiola, Abascal sostuvo que se trata del recurso habitual “cuando no son capaces de defender sus posiciones”. Aclaró que sus críticas no tienen relación con “la condición sexual de Guardiola”, sino con la decisión de la líder popular de convocar unas nuevas elecciones autonómicas que, según el dirigente de VOX, “eran innecesarias” y han generado inestabilidad en la región.
El presidente de VOX también dirigió sus reproches hacia el Partido Popular y el Partido Socialista, asegurando que ambas formaciones “unifican el voto permanentemente” tanto en Bruselas como en España. En este punto citó al presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, a quien acusó de criticar públicamente las políticas del Ejecutivo central mientras “no mueve un solo dedo” para frenarlas. “Es un escándalo verdaderamente insoportable”, añadió.
Abascal extendió esta crítica a Alberto Núñez Feijóo, argumentando que el líder del PP “tampoco mueve un dedo” frente al Gobierno. Afirmó que el Partido Popular debería haber presentado una moción de censura y recordó que “hasta ahora las únicas mociones de censura presentadas contra este Gobierno son las que presentó VOX en la anterior legislatura con la oposición del Partido Popular”.
