Choque en el Senado: VOX denuncia la falta de defensa del sector primario ante las políticas europeas
El senador de VOX por Valencia, Fernando Carbonell, ha interpelado este martes al ministro de Agricultura, Luis Planas, para exigirle una defensa más firme del sector primario español ante las políticas europeas derivadas del Pacto Verde Europeo y del Acuerdo de París. Durante su intervención, Carbonell ha reprochado al ministro que el Gobierno se limite a “ser un mero ejecutor” de decisiones tomadas “lejos de la realidad del campo mediterráneo” y ha reclamado que “España vuelva a decidir sobre su propio campo”.
Carbonell ha denunciado que “Europa ignora al Mediterráneo” y que existe “una brecha evidente entre la teoría normativa y la realidad del campo”, especialmente en sectores donde España es líder en producción. Ha señalado el caso de los cítricos, donde el país produce el 60% de toda la producción europea, pero compite “en desigualdad” con países como Sudáfrica, Egipto o Turquía, que —según ha subrayado— “no aplican los estándares comunitarios”. Como consecuencia, ha enumerado efectos como “precios hundidos, plagas importadas e inseguridad fitosanitaria”.
El portavoz de VOX también ha citado el arroz de la Albufera como un ejemplo de normativa que no tiene en cuenta las características de los cultivos mediterráneos. Ha denunciado que se exija reducir insumos en un cultivo ya vulnerable por la salinidad, la temperatura y las plagas, mientras “entra arroz asiático producido con sustancias prohibidas en la UE”. En la misma línea, se ha referido al viñedo mediterráneo y, en concreto, al de Utiel-Requena, donde —según ha apuntado— aumentan las enfermedades vinculadas al clima específico de la zona, mientras Bruselas retira herramientas “sin ofrecer alternativas reales”.
Carbonell ha extendido sus críticas a la situación en Tierra de Barros, donde ha recordado que existen 15.000 hectáreas paralizadas y más de 1.500 familias a la espera de soluciones. Ha calificado el proyecto como “estructural” y ha lamentado que no haya recibido impulso político ni desde la administración autonómica ni desde el propio Ministerio. “No es un ataque, es un hecho”, ha puntualizado ante la Cámara.
El senador ha resumido que “la frustración del agricultor nace de la sensación de que el Estado no está a su lado” y ha insistido en que el sector primario no reclama privilegios, sino “coherencia, respeto y reciprocidad”. Ha pedido al Gobierno que abandone su papel de “mero ejecutor” de decisiones diseñadas en Bruselas y que defienda la “singularidad mediterránea” en todas las negociaciones europeas. “España cumple lo que terceros países no cumplen, y ustedes no están defendiendo en Bruselas la singularidad mediterránea”, ha afirmado.
Carbonell ha concluido solicitando que el Ejecutivo recupere una estrategia nacional para proteger la producción española, reforzar los controles fitosanitarios y garantizar condiciones equitativas frente a la competencia exterior, reclamando que “España vuelva a decidir sobre su propio campo”.
