Mbappé firma otro doblete y el Real Madrid pasa por encima del Valencia con autoridad (4-0)

El Real Madrid continúa intratable en el Santiago Bernabéu. El conjunto dirigido por Xabi Alonso se impuso con autoridad al Valencia por 4-0, logrando su séptima victoria consecutiva en casa esta temporada —cinco en LaLiga y dos en Champions— y reforzando su liderato en el campeonato.
Desde el inicio, el Real Madrid impuso su ritmo. Arda Güler, muy activo entre líneas, filtró un pase a Mbappé en el minuto 6, aunque su disparo rebotó en Copete y terminó en córner. Valverde, instantes después, probó fortuna con un disparo con el exterior que rozó el palo. Vini Jr. también lo intentó con un centro-chut que obligó a intervenir a Agirrezabala.
El primer golpe llegó al cuarto de hora. Militão remató de cabeza un córner y el balón fue desviado por la mano de Tárrega dentro del área. Tras la revisión en el VAR, el colegiado Busquets Ferrer señaló penalti. Mbappé asumió la responsabilidad y no falló, colocando el 1-0.
El dominio blanco se acentuó tras el gol. Arda Güler volvió a encontrar a Mbappé, esta vez en una jugada trenzada por Bellingham. El turco llegó a línea de fondo y puso un pase medido para que el francés, con sutileza, anotara el 2-0 en el minuto 31. Fue el decimoctavo gol de Mbappé esta temporada y el decimotercero en LaLiga, encadenando ocho jornadas consecutivas marcando.
Antes del descanso, el Real Madrid pudo ampliar la ventaja con otro penalti cometido sobre Carreras. Vini Jr. falló desde los once metros y Agirrezabala rechazó también el posterior remate de Arda Güler. Un minuto después, Jude Bellingham se inventó una jugada magistral: controló escorado, superó a Beltrán con un giro y definió al palo largo para firmar el 3-0.
En la segunda mitad, el ritmo se ralentizó, pero el conjunto blanco mantuvo el control del juego. Mbappé tuvo otra ocasión clara en el 62’, bien resuelta por Agirrezabala. El broche final llegó en el minuto 83. Carreras, desde el costado izquierdo, se internó en el área y sorprendió con un potente disparo con la zurda directo a la escuadra, estrenándose como goleador con el primer equipo.
El Real Madrid administró la ventaja hasta el pitido final, manteniendo la portería a cero y dejando una nueva exhibición ofensiva ante su afición.
