Feijóo activa la maquinaria electoral del PP y promete una “limpieza total” del legado sanchista
Alberto Núñez Feijóo pone al PP en modo electoral y promete una “limpieza total” del legado del sanchismo. Anuncia que derogará leyes impulsadas por el Gobierno de Pedro Sánchez, al que acusa de corrupción y de utilizar el Estado como escudo. El líder popular presenta sus prioridades para un futuro Gobierno centrado en regeneración democrática, vivienda y seguridad.

El líder del Partido Popular lanza un duro discurso en el Comité Ejecutivo Nacional, anuncia un listado de leyes a derogar, acusa al Gobierno de corrupción y promete una “limpieza total” institucional si llega al poder.
Alberto Núñez Feijóo, presidente del Partido Popular, ha activado la maquinaria electoral de su partido con un discurso contundente durante el Comité Ejecutivo Nacional. El líder popular afirmó que el PP no solo reformará el país, sino que también “sanará la democracia”, y anunció que en septiembre presentará un listado de leyes impulsadas por el actual Ejecutivo que serán derogadas y sustituidas si el PP llega al Gobierno.
Feijóo insistió en que “toca hacer una limpieza total” y que su partido tiene una “responsabilidad histórica” de revertir lo que considera una etapa oscura bajo el mandato de Pedro Sánchez.
“Los que antes querían el poder por ambición, ahora lo quieren por miedo”, señaló, acusando al actual Gobierno de utilizar el Estado como escudo para esconder presuntas irregularidades.
“Todo se sabrá y todo se limpiará”, subrayó.
En su intervención, Feijóo arremetió contra Sánchez por convocar un nuevo mitin que, según él, solo servirá para “volver a mentir a los ciudadanos”.
Acusó al presidente del Gobierno de liderar un Ejecutivo marcado por “corrupción, mordidas y audios”, y lo describió como “el presidente más débil de la historia democrática de España”.
Feijóo aseguró que algunos colaboradores del PSOE ya se encuentran bajo proceso judicial o en prisión y acusó a los socialistas de comprar apoyos parlamentarios mediante “mordidas políticas”.
También criticó duramente la gestión del Gobierno en Cataluña, afirmando que “el problema de Cataluña no es España”, sino la corrupción, la okupación, la inseguridad y el acceso a la vivienda.
En materia de convivencia, el líder popular advirtió sobre el uso político que hace el Gobierno de los enfrentamientos sociales, enfrentando a colectivos entre sí para mantenerse en el poder.
Además, denunció la falta de control en las políticas migratorias y la degradación de las instituciones, y reafirmó el compromiso del PP con el respeto a la Justicia y la separación de poderes:
“En España no hay lawfare, hay delitos, delincuentes y servidores públicos que los persiguen”.
Feijóo adelantó que el PP no respaldará al Gobierno en el Parlamento, sino que ejercerá una oposición firme hasta derrotarlo en las urnas.
Describió al Ejecutivo como “el del apagón, el de los Koldos y el de la corrupción”, y aseguró que su partido está preparado para ofrecer a España “el Gobierno que merece”.
Finalmente, enumeró sus prioridades para los primeros 100 días de mandato:
regeneración democrática, vivienda, salarios dignos, rebaja de impuestos, más personal sanitario, política de seguridad, defensa de la lengua común, control migratorio y un plan nacional del agua.