Operación policial desmantela organización de explotación laboral en Aragón, Castilla y León, Cataluña, Comunidad Valenciana y Extremadura
La Guardia Civil y la Policía Nacional han liberado a 45 personas que eran explotadas laboralmente en explotaciones agrícolas de Aragón, Castilla y León, Cataluña, Comunidad Valenciana y Extremadura, en el marco de la operación Lhotse-Tiger. La operación conjunta ha culminado con la detención de nueve personas, tres de las cuales han ingresado en prisión provisional acusadas de delitos de trata de seres humanos con fines de explotación laboral, falsedad documental y pertenencia a organización criminal.
La organización criminal desmantelada tenía su base en la provincia de Zaragoza y estaba compuesta por ciudadanos de origen pakistaní y argentino. Los detenidos captaban a personas en situación de vulnerabilidad, principalmente migrantes procedentes de Nepal, Pakistán e India, prometiéndoles trabajos dignos en España. Sin embargo, las víctimas eran alojadas en viviendas insalubres, sometidas a vigilancia constante, sin documentación y obligadas a pagar por alojamiento, transporte y supuestos servicios de intermediación laboral.
Condiciones infrahumanas de vida y trabajo
Las víctimas vivían hacinadas, durmiendo en colchones en habitaciones saturadas, con un solo baño disponible y graves deficiencias estructurales. Además, debían abonar al grupo criminal 100 euros mensuales por el alojamiento y siete euros diarios por los desplazamientos a sus lugares de trabajo. En muchos casos, los explotadores actuaban también como intermediarios ante los empleadores, quedándose con parte de los salarios de los trabajadores.
La investigación, que se prolongó durante más de un año y medio, se inició en 2024 tras detectarse en Candeleda (Ávila) a varios trabajadores temporeros de origen asiático viviendo en condiciones precarias dentro de una nave industrial. Posteriormente, se hallaron siete trabajadores nepalíes en situación similar en una explotación agrícola en Valverde de la Vera (Cáceres).
Estos hallazgos llevaron a los investigadores a coordinar una operación conjunta que incluyó registros en Barcelona, donde se detuvo a un individuo por exigir dinero a cambio de devolver la documentación de una víctima. Asimismo, en Cáceres fueron arrestados dos responsables de otra explotación agrícola.
Más de veinte migrantes liberados en Caspe
El operativo culminó con registros simultáneos en dos domicilios de Caspe (Zaragoza), donde fueron detenidos los principales cabecillas de la red y se liberó a más de veinte personas que vivían hacinadas en condiciones deplorables.
Con esta operación, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado refuerzan su lucha contra la trata de seres humanos y la explotación laboral, delitos que afectan especialmente a los colectivos más vulnerables y que generan graves violaciones de derechos humanos.
