
El turismo internacional sigue consolidando su peso en la economía española. Entre enero y julio de 2025, los visitantes extranjeros gastaron un total de 76.074 millones de euros, lo que supone un incremento del 7,2% respecto al mismo periodo de 2024, según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
En estos primeros siete meses, España recibió más de 55,5 millones de turistas internacionales, un 4,1% más que en 2024. Este crecimiento confirma la tendencia positiva, aunque el ritmo de llegadas se ha moderado en los últimos tres meses.
Los principales mercados emisores fueron Reino Unido (17,6% del gasto total y cerca de 11 millones de visitantes), Alemania (11,7% y 6,9 millones de turistas) y Francia (8,1% y 7,1 millones). En cuanto a destinos, Canarias (18,5%), Cataluña (18,2%) y Baleares (15,3%) concentraron la mayor parte del gasto turístico acumulado.
El mes de julio, clave para el gasto turístico
Solo en julio, España recibió 11 millones de turistas internacionales, que generaron 16.452 millones de euros, un 6,1% más que en el mismo mes de 2024, frente a un incremento del 1,6% en llegadas. El gasto medio por turista ascendió a 1.493 euros, con un gasto diario de 210 euros (+6,9%).
Por países, el liderazgo lo mantuvo Reino Unido, con más de dos millones de turistas y un gasto superior a los 2.902 millones de euros. Le siguieron Francia (1,5 millones de visitantes y 1.465 millones de euros), Alemania (1,1 millones y 1.575 millones) y Estados Unidos, que con más de medio millón de viajeros generó 1.174 millones.
En cuanto a destinos, Illes Balears fue la comunidad más visitada en julio con 2,56 millones de turistas (+1%), seguida de Cataluña con 2,35 millones (-1,2%) y Andalucía con 1,54 millones (+5,5%). También destacaron los incrementos en Canarias (+6%) y Comunidad Valenciana (+1,4%).
Un turismo que gasta más y viaja mejor
El análisis del INE revela que la estancia mayoritaria fue de entre cuatro y siete noches, con más de 5,3 millones de viajeros. Además, la brecha entre el gasto y las llegadas se amplió: el gasto aumentó 4,5 puntos más que el número de turistas, lo que refleja un perfil de visitante que gasta más en cada viaje.
El turismo internacional en España mantiene así su senda de crecimiento, reforzando su papel como motor económico y consolidando a los destinos españoles como referentes en el mercado mundial.